El gobierno porteño quiso recordar el 24 de marzo y aportó sus feos carteles color patito, interventores anónimos no se hicieron rogar y al instante dialogaron con la consigna, reconrdando al fallido ministro de educación porteño de fin de 2009.
Pueden tener los mejores publicistas y fotógrafos. Pueden iluminar lo que ellos quieren. Pueden hacer imagen, pero no pueden lograr que el consumo y la apropiación se privatice. Publicidad Intervenida recorre la apropiación y resignificación política hasta el vacío mismo.